Movilización en la Niñez

Es un llamado urgente a considerar la importancia estratégica y el potencial que hay en los 1,2 billón de niños, niñas y jóvenes en la Ventana 4 /14. Es un ruego a abrir tu corazón y mente a la idea de alcanzar y levantar una nueva generación dentro de ese vasto grupo -una generación que pueda experimentar una transformación personal y que pueda ser movilizada como agente de transformación a través del mundo.

En el 2008, quince años dentro del énfasis de la misión mundial en la ventana 10/40, existen indicadores motivadores que esta ha sido una región altamente receptiva a la presentación del Evangelio. El índice anual de crecimiento de los seguidores de Cristo en la ventana 10/40, fue casi el doble que los de afuera de la ventana 10/40. Seguidores de Cristo en las naciones de la ventana 10/40 crecieron de 2.5 % de la población en 1990 a 4.7% en el 2005. La población general creció en solo un 1.5 % anual, mientras que los seguidores de Cristo crecieron en un maravilloso 5.4% por año 5. Si nosotros relacionamos estas estadísticas con el hecho que casi el 70% del mundo de 4 a 14 años (833,378,750) vive en la ventana 10/40, nosotros podemos empezar a observar la intersección de la ventana 10/40.
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Mientras desafíos y fracasos abundan, y el pesimismo de muchos adultos es ampliamente justificado, las posibilidades y el potencial de la ventana 4-14 es increíble.
Para muchos, la tendencia ha sido ignorar o desatender su potencial o ver aquellos en el grupo de edad 4 y 14 como un problema fastidioso a ser soportado.
Nosotros hemos fallado en entender el inestimable valor de estas vidas jóvenes, creadas a la imagen de Dios. Pero significativamente hemos fallado en reconocer que la mayoría de personas que alguna vez hará una decisión por Cristo lo hará a la edad entre las edades de 4 a 14 años.
Desde un punto de vista de la misiones, nuestro interés en el grupo 4 a 14 es no solo porque son el mas receptivo, sino también porque como veremos ellos son frecuentemente efectivos agentes para la misión. Por su puesto, Jesús comprendió su valor: “Yo te alabo padre, Señor de los cielos y tierra…( Mateo 11: 25-26)

Cristo es el Rey del Reino y la fe del niño es el modelo de todos aquellos quienes entrarían y vivirían por el Reino con el Rey Jesús. El Evangelio eleva a los niños a un lugar muy alto de honor en el Reino y les da responsabilidades morales. Los niños son tratados como miembros responsables de la familia de Dios, como aquellos quienes están “en el Señor” (Efesios 6:1)
Es imperativo que nosotros veamos a los niños y a los jóvenes como una crucial y estratégica fuerza que puede transformar y cambiar el mundo. Hablando de los niños, Jesús dijo, “de los tales es el reino de Dios” (Lucas 18:16).
Claramente, desde el tiempo de los primeros discípulos (Marcos 10:13-16) hasta hoy, hemos frecuentemente desestimado el valor y el potencial de los niños. A pasado el tiempo y otra vez hemos fallado efectiva y estratégicamente al alcanzarlos.
El desafío delante de nosotros es levantar hoy a los 4- a 14 años hacia una experiencia de vida abundante comprometida por Jesús (Juan 10:10b), liberarlos de una pobreza espiritual, mental, física, relacional, económica, social y ministerial, explotar su inmenso potencial y colocarlos en la línea de batalla para cambiar el mundo.

El uso de los 4/14 no es un concepto nuevo. Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento nosotros frecuentemente vemos a Dios usando niños y jóvenes para transformar el mundo. La lista de 4/14 es usados por Dios en la Biblia incluye algunos fascinantes individuos:

Samuel fue el niño a través del cual Dios envío un difícil pero necesitado mensaje al sumo sacerdote, Elí. La sensibilidad de Samuel a la dirección de Dios y su disposición a obedecer fue ejemplar. (1 Samuel 3)

David fue solo un joven cuando Dios lo escogió y empezó a usarlo. Siendo el menor de ocho hermanos, ni aún su propio padre lo tomo en cuenta cuando Samuel vino a buscar a aquel a quien Dios había escogido para ser el próximo rey.

Josías fue un niño-rey a través de cual Dios reformó el estado religioso y social de su país
(2 Reyes 22). Josías era de solo ocho años, cuando llego a ser rey, gobernando rectamente. Después como un adolescente y hombre joven hizo dramáticas reformas (2 Crónicas 34)

Ester, una niña huérfana quien estaría en su adolescencia cuando fue hecha reina y quien fue usada por Dios para salvar a los judíos de la total destrucción. (Ester 2)

Timoteo tuvo una fe bíblica desde su niñez, a través de su abuela Loida y su madre Eunice y luego a través de la instrucción de Pablo (2 Timoteo 1:5; 2:2; 3:14-15). Tanta fue la confianza de Pablo a Timoteo que él confío las iglesias al cuidado pastoral de Timoteo.s

”No solo por el simple hecho de que sean niños”, escribe Keith White, sino que algunos de los mas significantes actos y revelaciones de Dios fueron hechos a través de estos niños. Su fe y acción son críticamente importantes en el recuento y en el trabajo de los propósitos de Dios.

“Nuestra ambición primordial es la educación de nuestros niños…tomamos con el mayor
cuidado de todo la instrucción de los niños, y estimamos la observación de las leyes y
la piedad correspondiente a ellas el asunto más importante en toda la vida.”
Historiador norteamericano del 1er Siglo

Testimonio:
Desde 1998 hasta 2006, la región Sulawesi de Indonesia fue destrozada por la violencia entre las comunidades musulmanes y cristianas. El terrorismo, las bombas, decapitaciones y violaciones azotaron los pueblos de Sulawesi. Cientos murieron y miles fueron obligados a dejar sus casas. Solo en el año 2000, 500 casas fueron encendidas. Hoy en día el estado de caos se está cambiando debido a un avivamiento espiritual que está sucediendo. Un testigo informa, “La gente está escuchando un mensaje de reconciliación de una fuente inusual: un niño de ocho años. Debido a esto, los pueblos en esa área que en un tiempo fueron consumidos por el derramamiento de sangre, ahora se están transformando.”
Hoy en día los residentes musulmanes de la ciudad de Poso, quienes anteriormente no podían entrar a Kawua, ahora sí pueden. Los cristianos también se relacionan con sus vecinos musulmanes.

El mercado central, anteriormente un bastión musulmán, ahora no es solamente un lugar para musulmanes, sino un lugar donde los miembros de las dos comunidades que antes peleaban una guerra, hacen compras juntos.
“El milagro es tan real y delante de nosotros. ¿Cómo es que no lo creemos?” Adlan Moko Molewe, el niño predicador, dijo mientras la multitud le escuchaba atentamente. Mientras las multitudes adoran, su amigo de ocho años, Sel_n, ora por un toque de Dios. Cuando fue entrevistado por el noticiero CBN, Moko, quien es un refugiado cuya familia fue destruida, dijo, “Pienso que el Señor quiere que tengamos paz en Poso…el Señor quiere que tengamos un solo corazón. Debemos amarnos el uno al otro.”
Cuando el Pastor Rinaldy Daminik de la Iglesia Cristiana de Sulawesi fue entrevistado sobre lo que está pasando en Poso, el respondió, “Creo que el Señor está utilizando a los niños para predicar del arrepentimiento y gran transformación en Poso.
Podemos decir que esto es la semilla de la sangre de los mártires en Poso. Su sangre derramada en esta tierra ahora está dando fruto a través de Moko y Sel_n.” El resultado es una provincia más pacífica.
Baharuddin, un musulmán quien ha experimentado una sanidad milagrosa dijo, “Me gusta cuando todos con sus creencias distintas están alabando a Dios. Vi como el pueblo cristiano nos trata amablemente aun siendo nosotros musulmanes.
Le dije a mi amigo: Ves, es posible que los cristianos y los musulmanes vivan en armonía.”
Yus Mangun, un personaje público de la comunidad de Poso quien ahora es miembro del Concilio Legislativo de Sulawesi Central, informó que los disturbios comunales, los cuales se habían intensificado hasta llegar a conflictos sectarios, ya no existen. Pasados los días cuando la gente, juntada en grupos grandes, atacó y quemó los pueblos.
Todo como resultado del esfuerzo de un predicador de ocho años. Sí, como adultos muchas veces no lo entendemos. Pensamos que los niños no podrían ministrar de esta manera y con tal impacto.

¿Qué podemos hacer nosotros para movilizar a esta generación? Y… ¿Qué estamos haciendo?
Este es el tiempo de ocuparnos de ellos, de hacerlos parte del mover de Dios en las naciones. Ellos serán los que Dios utilizará, pero hoy somos nosotros los que les debemos dar el lugar.

Dios te bendiga y use para amar y alcanzar a los niños donde estás!

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Material extraído del Manual “Ventana 4/14” Autor: Luis Bush

Categorías: MOVILIZACIÓN

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